y nos cruzamos por casualidad,
que no quede en una simple letra
tu mirada ni la mía
y el cielo despeja mis dudas,
que tu corazón reciba mis latidos
para entenderme
y sin negar repito que existen tormentas
que no me detiene mi
me distrae
duermes,
mientras le explico al viento
que mi andar es como
el silencio
Y la caída de la lluvia
que corre por el acantilado,
es el sonido de mi alma...
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